Otro descubrimiento extraordinario sucedió en el área arqueologica de Pompeya, aquella ciudad destruida en el año 79 d.c por la erupción del Vesubio y que hoy fue el origen del hallazgo de un “Termopolio”, lugar donde se servía comida y bebida a los habitantes, intacto y decorado y aún con restos de alimentos.
El hallazgo fue realizado por el ministerio de Cultura italiano y el área arqueológica, los cuales quedaron sorprendidos ante tan descubrimiento y lo anunciaron a los medios como un “descubrimiento sorprendente en las nuevas excavaciones emprendidas dentro del proyecto de mantenimiento y restauración de la Regio V”.
Además, los arqueólogos quedaron realmente asombrados al ver que el Termopolio, en donde se solía servir comida a las clases más bajas de la ciudad, se encontrara totalmente pintado y con restos de comida que se vendía en la calle en envases y que es el origen de la tan popular y conocida “comida para llevar”.
Según los expertos, ya era costumbre de los pompeyanos consumir alimentos y bebidas calientes al aire libre, por eso ya se estudia el material hallado para comprobar, cuánto este descubrimiento puede ampliar el conocimiento sobre los hábitos alimentarios de la época romana.
Se estima que solo en Pompeya hay unos ochenta, pero ninguno con el mostrador completamente pintado, lo que confirma la naturaleza excepcional del hallazgo.